VIAJAR A BÉLGICA

Si estás planeando Viajar a Bélgica, en esta web encontrarás la información más relevante sobre este país Europeo. Descubre su multicultura, ciudades más importantes, monumentos, gastronomía, clima, precios y consejos básicos para un viaje excepcional.

[su_row][su_column size=»1/4″ center=»no» class=»»][su_button url=»https://belgicaviajar.com/#Guias-de-Destino-Belgica» background=»#1e73be» size=»10″ wide=»yes» center=»no» radius=»round» icon=»icon: university» text_shadow=»1px 1px 1px #000000″]Guías de destino[/su_button][/su_column] [su_column size=»1/4″ center=»no» class=»»][su_button url=»https://belgicaviajar.com/#Viajar-a-Belgica-Lugares-Turisticos» background=»#1e73be» size=»10″ wide=»yes» center=»no» radius=»round» icon=»icon: eye» text_shadow=»1px 1px 1px #000000″]Lugares turísticos[/su_button][/su_column] [su_column size=»1/4″ center=»no» class=»»][su_button url=»https://belgicaviajar.com/#Cuando-Viajar-a-Belgica-Clima» background=»#1e73be» size=»10″ wide=»yes» center=»no» radius=»round» icon=»icon: question-circle» text_shadow=»1px 1px 1px #000000″]Cuándo Viajar[/su_button][/su_column][su_column size=»1/4″ center=»no» class=»»][su_button url=»https://belgicaviajar.com/#Cuanto-cuesta-viajar-a-Belgica» background=»#1e73be» size=»10″ wide=»yes» center=»no» radius=»round» icon=»icon: eur» text_shadow=»1px 1px 1px #000000″]Costes del viaje[/su_button][/su_column][/su_row]

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 Guías de Destino: Bélgica

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 Viajar a Bélgica. Lugares Turísticos

Bélgica ofrece una forma distinta de hacer turismo, pues sus ciudades son monumentos históricos y culturales por sí solas.

Es imposible visitar un sitio histórico sin que los pies caminen todo el lugar, pues la magia de sus calles, bosques y ríos lo tienen todo para enamorar al viajero de este diminuto pero emblemático reino.

Casco histórico de Bruselas

En su capital, se encuentran un número infinito de lugares de interés para todos los gustos y todas las edades.

La historia de la cosmopolita Bruselas, capital política de la Comunidad Económica Europea: sede del Parlamento, el Consejo y la Comisión respectivamente, se caracteriza paradójicamente por los grandes cambios políticos experimentados durante toda su existencia.

La Gran Plaza de Bruselas

El sitio más concurrido de la capital es indiscutiblemente la gran plaza. Su arquitectura del siglo XVII, expuesta magistralmente en el conjunto estructural que la circunda, no tiene igual en toda Bélgica.

La belleza singular de sus edificaciones hacen que el visitante no sepa a dónde dirigir la vista, cuando se acerca a través de una de las seis calles que dan acceso a este adoquinado patio, que congrega a decenas de edificios con incalculable valor monumental.

De entre todos se erige el Ayuntamiento, con su majestuosa torre gótica de 96 metros, gobernante absoluta de las alturas, mientras dirige la sinfonía de luces y sombras que congregan a locales y visitantes en una noche y en una reconfortante cerveza belga.

El Casco histórico y medieval de Brujas

Escondida por más de cuatro siglos, Brujas es la joya medieval mejor conservada del mundo y los más de 3 millones de turistas al año que visitan sus empedradas calles, la convierten en la ciudad belga más visitada, por encima incluso de Bruselas.

Es además la capital de la región de Flandes Occidental y su casco histórico y cultural fue decretado en el 2.000 por la UNESCO, Patrimonio de la Humanidad.

La Plaza Mayor es el corazón de esta pequeña ciudad, en donde sábado tras sábado, confluyen lugareños y turistas en el tradicional mercadillo. En la plaza anterior se encuentra la famosa torre de Belfort, desde la cual, a 83 metros de altura y luego de subir 365 escalones, se tiene la mejor panorámica de toda la región.

El Manneken Pis

Para muchos, dado su reducido tamaño que no excede los 50 centímetros de altura, pasa inadvertido en sus visitas turísticas. Fue creado en el año de 1.388 y representa a un infante desnudo orinando en una fuente. Lo cierto es que por su gran importancia local, muchas fueron las ocasiones en que intentó ser robado, de hecho un ex convicto logró hurtarla.

La consternación de los habitantes de la capital fue tal, que en 1.619 fue colocada una copia en su lugar que se ha mantenido hasta la actualidad. Sin mayor razón aparente se convirtió en un emblema histórico de la capital belga.

El Atomium

El Atomium pasó de ser el símbolo de la Exposición Universal de 1.958 a ser símbolo de la ciudad de Bruselas. Este monumento tan duramente criticado en sus inicios es, hoy por hoy, uno de los mayores atractivos turísticos de la capital belga.

Es obra de André Waterkeyn y consiste en un átomo de hierro de 165 mil veces su tamaño original. Sus 102 metros de altura lo conforman 9 esferas de 18 metros de diámetro cada una, que se unen entre sí por ramales de escaleras mecánicas.

La Plaza de Burg

La segunda plaza más concurrida de toda Brujas es el hogar de edificios históricos de especial trascendencia.

Entre ellos está el Ayuntamiento más antiguo de todo el país, cuya fachada data del siglo XIV, el Palacio de Justicia del año 1.727, en donde funciona el museo Het Brugse Vrije, la barroca Probostía y la Basílica de la Santa Sangre.

El casco antiguo de Gante

En julio tiene lugar en esta ciudad belga el Festival de Gante: son diez días de baile, música, teatro en todas las plazas y calles, que reciben a cientos de turistas, atraídos por la energía, la juventud y su patrimonio cultural.

Hogar de la Universidad, Gante congrega a una numerosa población estudiantil que le confiere un ambiente vibrante y dinámico, convirtiéndola en una de las ciudades más animadas del continente europeo.

Sus sitios de interés son la Catedral de Gante, cuya construcción duró tres siglos, el Castillo de Gante, antigua residencia de los condes de Flandes, el Ayuntamiento, el Belfort, la Iglesia de San Nicolás y el Korenmarkt.

Parque Cincuentenario y el Arco del Triunfo

Es un sitio de esparcimiento y descanso construido por el Rey Leopoldo II, con amplias áreas verdes, caminerías, museos y una imponente puerta triunfal, en ocasión de la feria internacional proyectada para conmemorar el cincuenta aniversario de la Emancipación Belga.

No puede irse a Bélgica sin regresar con una fotografía cuyo fondo sea este magnífico monumento de impresionantes dimensiones y belleza, cuya construcción se prolongó 25 años más, completándose para la celebración del 75 aniversario de la independencia, en el año de 1.905 respectivamente.

La Iglesia de Nuestra Señora (Brujas)

Es una iglesia medieval con una torre en su nave colateral norte, que es la segunda torre de ladrillo más alta del mundo con la impresionante altura de 115 metros, construida entre los años 1.270 y 1.340.

Su construcción se inició en el siglo XIII y se prolongó hasta el siglo XV, durando más de doscientos años respectivamente.

Muchos turistas vienen a conocer y a detallar su más grande tesoro artístico, la estatua de la Virgen y el Niño, escultura realizada en mármol blanco y obra del célebre escultor y pintor Miguel Ángel.

Castillo de los Condes de Flandes

También conocidos como Castillo Gravensteen, se construyó en el año 1180. Ubicado en el río Lys, en la ciudad de Flandes en Gante. Es en la actualidad el único castillo de Flandes que se mantiene casi intacto, y sin duda uno de los más conservados de Europa. El fin de construir este castillo era para mantener la riqueza de los Condes de Flandes.

En la actualidad está abierto a turistas, una de las salas que más llaman la atención, es la sala de torturas. Ahí se pueden ver los instrumentos con los que se efectuaban torturas, los cuales se utilizaban para realizar juicios en la edad media. Es sin duda un lugar imperdible si se visita la ciudad de Gante.

Museo de Instrumentos Musicales en Bruselas

Aquí se puede encontrar la colección de más de 7 mil instrumentos musicales que data desde el Medioevo hasta los tiempos actuales.

El edificio Old England que sirve de sede a este museo de cuatro plantas, ha sido considerado una joya arquitectónica que fue concebida en el año de 1.899, con el objeto de servir de gran almacén.

 Cuándo Viajar a Bélgica. Clima

En Bélgica se tiene un sistema climático marítimo templado, debido a los vientos procedentes del Océano Atlántico, lo que significa afluencia de precipitaciones durante casi todo el año, con predominante presencia en la estación de otoño y la temperatura promedio anual se mantiene en 10 grados Celsios.

Mientras que en el continente las temperaturas son más extremas, con gélidos inviernos y fuertes veranos, en el litoral del país en cambio son templadas y constantes.

En el Mar del Norte la media mensual registrada es de 2 grados, desde enero hasta los 18 grados en el mes de julio, situación que se evidencia en toda la zona norte. A medida que se avanza hacia el interior del país, específicamente llegando a Bruselas, la media se torna más extrema y se arriba a los un grado bajo cero en el mes de enero y 23 grados en julio respectivamente.

Los niveles registrados de pluviosidad alcanzan los 805 mm al año y son los meses de abril y de noviembre en los que más llueve, pero no en todos los lugares del país se tiene esta condición, la frecuencia de las lluvias es mayor en los macizos de las Ardenas y también en la franja costera.

Invierno

Es cierto que en esta época se alcanzan temperaturas bajo 0, pero es indescriptible el esplendor de los paisajes cuando la nieve acampa durante estos meses, por lo que es la estación más bella para conocer Bélgica. A pesar de las gélidas condiciones las calles siempre están despejadas, pues los propios lugareños están acostumbrados a mantenerlas transitables.

La ropa de abrigo es imprescindible cuando se viaja para Bélgica en esta temporada, sobre todo en la noche, cuando se registran las temperaturas más bajas.

Primavera

En esta época aumentan progresivamente las temperaturas dándole el adiós al helado invierno. El turista podrá descubrir las historias y escondidos tesoros, en un tiempo ideal para pasear y disfrutar de cálidos días llenos de sol, rica comida y fresca cerveza belga.

Verano

Es un tiempo muy esperado por los lugareños para salir de vacaciones, pues el verano belga no es tan cálido y el tiempo es realmente agradable. Julio y agosto son los meses con mayor calor durante todo el año, aunque en líneas generales, las temperaturas promedios no sobrepasan los 20 grados. No debe de olvidarse que en este país llueve durante todo el año y estar prevenido no está de más.

Es en esta temporada cuando los turistas llegan de todas partes a las ciudades turísticas de Bélgica para apoderarse, por así decirlo, de sus calles, plazas, parques y plazas: el ambiente es mágico y propicio para disfrutar al aire libre de los escenarios de Bélgica.

Otoño

Los días se tornan grises, pero las temperaturas siguen siendo agradables. El otoño es una temporada buena para el turismo, pues a pesar de las ocasionales lluvias, el clima es estable y ofrece las condiciones para que el viajero pueda llevarse la mejor cara de Bélgica.

Los colores y tonos de los árboles de plazas, bosques y caminerías hacen un contraste único con las edificaciones medievales que se encuentran en Brujas o en Gante. El gris de los días no logra opacar la imagen que parece salir de un cuadro, por los tonos que se pasean desde el rojo más intenso hasta el verde más tenue.

 Cuánto cuesta viajar a Bélgica.

Para poder optimizar la inversión en lo que a la compra de los boletos respecta, es importante adquirirlos con un par de meses de antelación, pues es común pagar precios elevados al comprar tickets de último minuto. También el precio está en función de los aeropuertos, a través de los cuales se entra o sale del país.

La temporada de viaje también ofrece algunas ventajas económicas a la hora de la adquisición de los boletos. El verano es la estación correspondiente a la temporada alta, para visitar las ciudades turísticas que el país belga tiene por ofrecer, por lo que escoger como fecha tentativa los meses de diciembre a febrero, genera un ahorro en este apartado en particular.

Alojamientos

Los precios de hostales cambian en función del lugar de alojamiento. Una cama en un hostal en Bruselas cuesta alrededor de los 25 euros, mientras que en Brujas y Amberes el precio es de 20 euros. Otra opción a tomar en cuenta, en caso de compartir el espacio de viaje con otras personas, se puede ubicar una habitación doble privada en una vivienda por el sistema Airbnb.

Si se dispone de mayor presupuesto podría optarse por rentar un departamento entero para dos personas, con un costo de aproximadamente 42 euros por cada uno. Este precio de 42 euros por persona, también se corresponde con las tarifas de alojamiento de un hotel de tres estrellas. En Brujas en cambio, la tarifa de una habitación en un hotel de tres estrellas está por el orden de los 50 euros.

Comida

Este apartado está en relación directa con el sistema de alojamiento escogido, pues si el viajero decide rentar un apartamento para cubrir su estadía, podrá cocinar en casa para ahorrar dinero y reservar algo adicional para disfrutar de los platillos y bebidas belgas cuando sea de su antojo.

También dependerá de los gustos de cada quien, pero definitivamente comprar en el supermercado y cocinar genera un gran ahorro en lo que a la comida respecta, Se debe recurrir a cadenas de supermercados grandes que ofrezcan mejores precios, como es el caso de Lidl. El presupuesto de dos personas por cuatro días corresponde a un promedio de 45 euros.

Un almuerzo sencillo con una bebida y en la zona céntrica de Bruselas o de otra ciudad turística está en el orden de los 15 euros y una cena en restaurant cuesta aproximadamente 35 euros.

Transporte

Anteriormente se dijo que la movilización por tren era la opción más económica y efectiva. Desde el aeropuerto al centro de Bruselas la tarifa es de 8,60 euros y solo demora 20 minutos, contra los 60 euros que podría costar el servicio del taxi para el mismo recorrido.

La tarjeta MOBIB solo cuesta 5 euros y permite cargar crédito para pagar tarifas en promoción correspondiente al transporte público. Si se va a permanecer en la capital un promedio de cuatro días se recomienda adquirir el pase de 10 tickets por apenas 14 euros, que son más que suficientes, alternando claro está, con caminatas turísticas y de esparcimiento.

Entradas a monumentos

Lo bueno de estar en Bélgica es que no se pasa todo el tiempo en museos o en edificios, ya que este país se disfruta caminando, pues muchas de sus atracciones están al aire libre. Siempre es oportuno disponer de un presupuesto para entrar a visitar esas atracciones favoritas.

La entrada al Museo de los Instrumentos vale 10 euros, los Museos Reales de Bellas Artes se visitan por 13 euros, la torre de Belfort de Brujas por 11,80 euros, el Museo de Groeningen por 8 euros, respectivamente.

Resumen de los gastos de viajar a Bélgica*

Alojamiento: 600€
Comidas: 450€
Entradas: 100€
Ocio y diversión: 100€
Transporte: 100€

*Opción económica, precios aproximados para dos semanas. Los costes variarán enormemente en función de la planificación y forma de viajar de cada persona, pero permiten hacerse una idea.

 Requisitos para viajar a Bélgica

Ubicado estratégicamente en el noroeste europeo, entre Francia, Alemania y Holanda, el Reino de Bélgica es uno de los países que conforman la Comunidad Económica Europea. Para todo aquel que desee conocer este mágico lugar, se enuncia a continuación todo lo que se requiere consignar y considerar antes de emprender el viaje.

Desde la documentación hasta consejos, información sobre el clima y sitios de interés, aquí podrá encontrar todo lo que se debe saber para viajar a Bélgica y vivir la mejor experiencia que este pequeño pero único reino, lleno de historia, cultura, arte y magia, puede ofrecer.

Visado y estadía máxima

El visado es indispensable para entrar a Bélgica y es en esencia el documento que autoriza la entrada al país, así como su salida respectivamente. Además es el permiso de estadía del turista, por un tiempo que no sobrepase los noventa días calendario.

Este documento debe ser solicitado en el país de origen del viajero, por lo que es menester acudir al Consulado o Embajada belga con anterioridad, para efectuar los trámites en un tiempo oportuno, que no comprometa la realización del viaje.

Aquellos turistas oriundos de Canadá, Argentina, del Vaticano, Andorra, Costa Rica, Australia, Brasil, Croacia, Brunei, Corea, Bolivia, Guatemala, el Salvador, Chile, Honduras, Estados Unidos, Hong Kong, Israel, Malasia, Nicaragua, México, Uruguay, Nueva Zelanda, Singapur, Panamá, Paraguay, Rumania, Niue y Venezuela, están exentos de la solicitud del trámite de visado.

Cuando se trata de un pasajero en tránsito, no tendrá problema a causa de este requisito, ya sea porque sea un viaje con escala en cualquier locación de Bélgica o cuando el pasajero requiera bajar del avión y conectar otro vuelo para llegar a su destino, todo esto con la condición de portar toda la documentación en regla.

Los países europeos, incluyendo Bélgica, firmaron lo que se conoce como el Acuerdo de Schengen, con el objeto de permitir el libre tránsito de sus ciudadanos a través de sus fronteras, por lo que los turistas provenientes de Alemania, Austria, Dinamarca, España, Finlandia, Francia, Grecia, Italia, Luxemburgo, Holanda, Suecia, Portugal, Noruega e Islandia no tienen que tramitar la visa.

Así mismo, aquellos viajeros que porten una tarjeta de residencia o una visa para cualquiera de estos países, podrá permanecer en todo el espacio Schengen, con tan sólo presentar su NIE y pasaporte respectivamente. La estadía máxima está establecida en 90 días y el costo de este trámite es de 60 euros.

 Pasaporte

Solo las personas que provengan de los países que integran la Unión Europea, de Islandia, Liechtenstein, Mónaco, Noruega, San Marino y Suiza, que tengan el respectivo DNI (Documento Nacional de Identidad), no necesitan portar el pasaporte.

Para todos los demás es un documento de carácter obligatorio y su vigencia debe cubrir todo el período de permanencia en el país, que como ya se mencionó anteriormente, es de un máximo de tres meses.

Documentación adicional

Algunos de los siguientes recaudos pueden ser necesarios en los controles fronterizos establecidos, por lo que debe considerarse su tramitación respectiva:

• Motivo de la estadía. Consiste en justificar la razón del viaje, para lo que deberá portarse la reserva del hotel o a su defecto, la carta de invitación por parte de familiares o amigos residentes en Bélgica, que ofrecen su vivienda en calidad de alojamiento.
• Financiamiento económico durante la estadía. El monto está definido en un mínimo de 45 euros diarios. Debe presentarse en forma de tarjetas de crédito o en efectivo y se constituye en el capital con el que el viajero cuenta para financiar su permanencia en Bélgica.
• Seguro médico válido en Bélgica y en todo el espacio Schengen. La cobertura debe estar establecida en 30.000 euros y sebe ser vigente durante todo el periodo en el que el turista esté en el país.
• Pasaje de ida y retorno.
• Pasaporte con vigencia de un mínimo de 180 días, contados a partir del ingreso a Bélgica.

Si el viajero es menor de edad y a su vez procede de alguna nación del espacio Schengen, es necesario que tenga a disposición el DNI y la autorización de los tutores legales debidamente avalada por alguna dependencia policial, todo esto en caso de no contar con el pasaporte.

Dinero requerido para viajar a Bélgica

De presentarse la situación de que los funcionarios no acepten los documentos portados como confiables o de no contar con la carta de invitación o algún otro recaudo adicional, se debe recurrir a la comprobación de poseer los fondos mínimos económicos exigidos, establecidos en 45 o 50 euros diarios, además de tener el boleto de salida del espacio Schengen ya pago.

Es recomendable tener disponible en dinero en efectivo la suma solicitada, pues se constituye en la manera más expedita de justificar los recursos. Se puede recurrir a otros medios, como lo son los cheques de viajero, las tarjetas de crédito o a través de algún tipo de compromiso financiero del anfitrión, que garantice la cobertura de los gastos de estadía del turista.

 Cuestiones frecuentes previas al viaje

Bélgica es un pequeño estado federal conformado por Flandes, Valonia y Bruselas, de apenas unos 30 mil kilómetros cuadrados, lo que lo hace fácil de recorrer y conocer. A pesar de su menuda geografía, no tiene nada que envidiarles a sus vecinos inmediatos, en lo que a cultura, arte e historia respecta.

Es por ello que para tener un viaje inolvidable, la clave es estar informado y así poder planificar, para lo que primero requiere tomar nota de los siguientes consejos:

Ubicarse geográficamente para planificar la ruta de viaje.

Bélgica está ubicado al noreste de Europa y su capital es Bruselas. Hasta el siglo XVI el territorio de Bélgica era parte de lo que se conocía como Los Países Bajos Borgoñones, junto con Luxemburgo, la actual Holanda, el Nord–Pas–de–Calais de Francia y una parte de Alemania, respectivamente.

El aeropuerto de Bruselas-Nacional, conocido también como Zavantem es el acceso principal a Bélgica. También se dispone del Aeropuerto Bruselas Sur o Charleroi, ubicado a 70 kilómetros de la ciudad.

La planificación de la ruta es importante para escoger el tipo de transporte a emplear, de forma tal de obtener el mayor provecho por el menor precio.

Viajar por tren en Bélgica es la mejor opción.

Este país tiene la más densa red ferroviaria de toda Europa, además que resulta bastante económica. Funciona muy bien no solo para movilizarse entre ciudades, sino también en el casco urbano, pues hay una frecuencia alta de trenes en las estaciones, con muy buena ubicación y se conectan muy eficientemente.

Es por esto que en Bélgica casi no se emplea el autobús como vehículo de transporte interurbano.

Si se proyecta emplear el tren más de una vez, se recomienda adquirir el Rail Pass, con un costo de 76 euros para diez viajes, incluyendo trasbordo a cualquier lugar del país. Puede ser compartido con más personas.

En el caso de menores de 26 años se puede comprar el Go Pass por 60 euros, con las mismas condiciones que el Rail Pass.

El empleo del coche suele dar mayor movilidad, aunque no debe dejarse de considerar que los lugares de interés se ubican dentro de las ciudades en la mayoría de los casos, por lo que el tren es la opción más eficiente, sin contar que con el coche hay que ubicar aparcamiento.

• Pedir folletos de viaje antes de salir. A través de internet se pueden descargar folletos gratuitos de las principales ciudades de Flandes, como lo son Bruselas, Brujas, Amberes, Malinas, Gante y Lovaina. En lo que respecta a la región de Valonia se debe proceder de igual forma que con Flandes.

También se pueden visitar en los diferentes países folletos turísticos en las oficinas de turismo o a su defecto, pedirlos en Bélgica al llegar.

• Adquirir la City Card, en caso de planificar visitas a museos que requieran el empleo de transporte público. En algunas ciudades incluyen entradas a museos y ofertas para visitar otras atracciones y pueden ser compradas en museos, tiendas online y en las oficinas de turismo locales. También se pueden comprar con diferentes lapsos de duración.

Viajar preferiblemente en el otoño o el invierno.

Cualquier época es buena en Bélgica para emprender el viaje, pero en verano las ciudades turísticas están repletas de turistas y los precios aumentan considerablemente, con excepción de Bruselas, que suele estar solitaria en esta época del año.

En diciembre, en cambio, el país está lleno de mercadillos navideños, que a pesar del frío invernal, la temperatura no suele bajar de los 0 grados: el ambiente en las ciudades y pueblos es mágico en esta temporada en particular.

• Fines de semana en Bruselas y entre semana en Brujas. Los hoteles son más baratos que en el resto de los días de la semana en la capital, contrario a lo que ocurre en Brujas en donde los hoteles son más caros los fines de semana. Para ahorrar dinero es importante conocer esta dinámica entre estas dos ciudades turísticas tan particulares.

 Gastronomía en Bélgica.

Hablar de comida en Bélgica es hablar de patatas fritas, la cerveza y el chocolate, pues estos no saben mejor en otra parte del mundo como en este pequeño reino.

Aunque muchos son los sabores que definen su gastronomía, es con estos tres elementos que se podrán descubrir nuevas formas de degustarlos en cada uno de los sitios, en cada ciudad.

Las Fritkot

En cada rincón se encontrarán puestos de patatas fritas, aunque no ofrecen en todas partes ese sabor especial que las define como patatas belgas. Las Fritkot son memorables y se pueden comer en pequeños restaurantes reconocidos y ventas de chips locales. Algunos de esos puestos establecidos en Bruselas, se enumeran a continuación:

• Frita Flagey, en Place Eugene Flagey
• Pitta freír Capilla, ubicada en Place de la Chapelle.
• Friture René, ubicada en Place de la Résistance 14.
• Maison Antoine, en la Place Jourdan 1.
• Friterie Charles, en la Dumont Place 1.
• Clementine, en St Job.
• Barrera, en la Avenue du Parc 5, 1.060 Saint Gilles.

La cerveza

Muchos son los sabores que Bélgica tiene que ofrecer, en lo que a cerveza respecta, pero distinguen para optar a elegir la Kriek, Lager, Ambar, Gueuze, Lambic, entre blancas y oscuras.

Además en torno a la cerveza se desarrollan un sinfín de actividades, entre las que se mencionan las degustaciones que se realizan en casas cerveceras tradicionales como es el caso de la Casa de los Cerveceros en Bruselas. No está de más dar un recorrido por el Museo de Bruselas en la cervecería Cantillon.

Si el visitante quiere tener esta experiencia en Brujas, puede acercarse a la Cervecería De Halve Maan y disfrutar de las degustaciones en Brugse Zot y Straffe Hendrik respectivamente.

Comida tradicional belga 

Se enumeran algunos platillos que son característicos del fogón belga y que el viajero no puede perderse:

• Los mejillones con patatas fritas.
• El waterzooi de Gante. Está hecho a base de caldo de pescado o de pollo con crema, puerros y por supuesto, patatas. Sencillamente delicioso.
• El estofado flamenco. Consiste en un guisado de carnes de diferentes tipos, bien sea de res o cerdo, ternera o la mezcla de estos, todo depende de la receta, en una densa salsa de cerveza, levemente endulzada con azúcar morena.
• Es un plato rústico, a base de tocino asado a la parrilla, con puré de patatas de contorno y verduras, pundín negro y salchichas.

Gofres

Bélgica tiene muchas delicias para ofrecer su lado dulce, empezando por los famosos gofres belgas. Se ofrecen dos tipos principalmente, el gofre de Bruselas y el gofre de Lieja.

El de Bruselas tiene forma rectangular y una característica textura suave y ligera. Es esponjoso, gracias a su particular formato y es servido con una generosa porción de polvo de azúcar. El gofre de Lieja es de forma redonda y de textura irregular. La masa es más densa y dulce.

Chocolate

El chocolate es el sabor que representa el diestro arte belga distintivo: es el símbolo por excelencia del dulce sabor de Bélgica. Desde los sabores clásicos, como el tradicional praliné hasta la infinita oferta de opciones, llenos de originalidad, como afrutados, especiados, suaves, amargos, entre otros. Los hay en cada rincón en el centro de Brujas y Bruselas y es en el Museo del Cacao y Chocolate de la gran capital que se puede conocer a fondo sobre la historia y el proceso de elaboración de este manjar.

En Brujas se puede hacer el tour del Choco Story, que a través de una exposición, cuenta la historia del chocolate en Bélgica, desde sus inicios hasta los tiempos actuales. Lo mejor del tour es el final, pues se puede disfrutar de una demostración de elaboración de chocolate belga, con degustación incluida.

 Seguridad al viajar a Bélgica.

Bruselas, al igual que el resto de las ciudades turísticas belgas es muy segura para los viajeros que la visitan. Es el centro neurálgico de Europa, lo que demanda tomar precauciones adicionales, pues no puede evitarse el hecho de que pueden darse situaciones o amenazas de grupos irregulares, contra alguno de los organismos emblemáticos que tienen su sede en la capital.

El riesgo de que ocurran desastres naturales es mínimo, pero el riesgo a ser asaltado es de nivel medio. Es por esto último que se recomienda al turista estar sumamente atento y evitar mantenerse en áreas muy frecuentadas y alejarse de las manifestaciones púbicas.

De igual manera si se está en las estaciones del tren o del metro como la Bruxelles Midi, Bruxelles North y la Bruxelles Central Station, se debe estar pendiente de las pertenencias, por el alto nivel de riesgo de ser víctima de algún delincuente, que ataca particularmente al que está desprevenido, en medio de la gran cantidad de turistas que congregan sus ciudades.

Las calles

Andar por las calles de Bélgica es bastante seguro. Sin embargo, como en todos los países, algunos lugares son mejor evitarlos durante la noche, como es el caso de Anneessens, St Josse, Anderlecht, Marollen Chaarbeek, Bruselas Norte y Molenbeek. Estos son barrios periféricos de Bruselas, en donde se han registrado atracos y robos a los turistas, por lo que se opta recomendar a los visitantes mantenerse en las zonas resguardadas por la policía de la ciudad.

Si se encuentra visitando la plaza central o el Manneken pis, o en otro sitio en donde se mantenga mucha gente agrupada o en eventos concurridos, se debe igual mantener una conducta de alerta para evitar ser blanco de la delincuencia.

Carteristas

Otro foco de inseguridad son los estafadores que suelen operar en la capital: la estrategia consiste en distraer al turista para hurtarle sus pertenencias. No debe perderse de vista la documentación, la cámara, el teléfono y todo lo que se lleve consigo y no caminar en zonas al aire libre sin tener compañía.

Es importante saber que hay presencia permanente en las zonas de gran afluencia de turistas, de los cuerpos de seguridad durante las 24 horas del día, con el fin de minimizar el riesgo de atentados que pongan en peligro la integridad física de los ciudadanos, a quienes se puede acudir ante cualquier percance que se tenga.

Si se cumplen los protocolos de seguridad mínimos recomendados, no surgirán inconvenientes en torno a la seguridad. También se puede acudir a cualquier estación policial, por si se presenta algún extravío de documentos o pertenencias, en donde le ayudarán a canalizar la recuperación de las mismas.

Otra recomendación útil es dejar en el sitio donde se esté quedando el visitante, los objetos de valor y portar sólo lo que se requiera para el paseo o la jornada del día, puesto que en estos sitios no se pierde nada y siempre se mantiene un alto nivel de seguridad.

Riesgos de viajar a Bélgica

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Costes y requisitos

Cuando planeamos viajar, lo primero que debemos pensar es en el coste de movernos hasta el país, debido a que en cada uno hay diferentes precios. En Bélgica los costes se basan en alojamiento, comida y entrada a museos. Para el transporte hay diferentes opciones, como ocurre en la mayoría de países de Europa. Escocia es un país que te facilita el pago de peaje, por lo cual es recomendable alquilar un auto, pero si deseas moverte dentro de una ciudad, una moto o una bicicleta es buena opción.

Hacer turismo en China es muy común, por lo menos es uno de los países más visitados en la actualidad. Ir puede tener costes considerables, si viajas por dos semanas, puede ser que 2000 euros por persona esté bien. Todo depende de cuánto se quiera gastar cada persona y el presupuesto que tenga. Hay que tomar en cuenta también los requisitos de entrada, para viajar a Egipto, por ejemplo, debes tener una visa vigente. Esta se debe pedir dos meses antes de viajar al país y no la necesitan las personas que forman parte de países de la Unión Europea.

Uno de los países más baratos que puedes visitar es El Salvador, además de visitar monumentos antiguos como las Ruinas del Tazumal, si vas a hacer turismo en El Salvador, debes saber que te vas a enamorar de sus lagos, montañas y de sus hermosas playas del Océano Pacífico.

Seguridad de viaje

Una pregunta que nos planteamos al viajar es la seguridad del país, problema que en Bélgica no tenemos, debido a que como en la mayoría de países de Europa, la seguridad es una de las cosas primordiales.

A pesar de no ser uno de los países más ricos de Asia, en Vietnam se puede percibir una seguridad que en pocos países. Es importante no arriesgarse, pero los índices de criminalidad son muy bajos comparados con países cercanos. Algo que no podemos ver en Argentina, ya que el hermoso país latinoamericano nos recomienda tener mucho cuidado con carteristas y no subirse a los taxis que no estén registrados, ya sea por timos o hurtos. Disfrutar de cada país depende de cómo nos informemos para mantener la cautela.

Absorber naturaleza pura, subir volcanes, cruzar ríos hermosos rodeados de diferentes tipos de aves, es lo que encontrarás en Costa Rica. Un país con una riqueza natural inigualable, ideal para relajarnos. Ya que es uno de los más visitados en América Latina, tiene niveles de seguridad muy altos, por lo que viajarás sin ningún miedo.

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